Turbio.
Modos foráneos de hablar.
Espejismos de un hogar (prismas de rostros que sonríen).
Armazones porque te sostienen, me raspé - mis rodillas.
Suecos altos, vidas vestidas en femeninas curvas, con rasos vestidos.
Palcos y sus caudales sombríos, cuán reconocible dicha tempestad, la que fue vertida por cualquiera de ellos.
Bajo mi frente, bajo mi rostro sin ojos, como si no fuera lo desesperado, el ruido agudo de sus sonrisas.
Débiles, el mundo entero y el amor adentro.
Eterno retorno apuntándome a las costillas.
Bendito seas tú, cielo eterno.
07 marzo 2012
Publicado por soy un álamo en miércoles, marzo 07, 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Copyright © 2011 The mystery of stillness
Designed by headsetoptions, Blogger Templates by Blog and Web
0 comentarios:
Publicar un comentario